Cuidados del cordón umbilical

El cordón umbilical es la unión entre el bebé y la mamá,  por donde se alimenta cuando está en el vientre materno. Recibe el oxígeno que necesita y los nutrientes a través de él, el cual está conectado al útero de la mamá.

Después del nacimiento del pequeño el cordón umbilical  se corta con unas pinzas y sujeta por uno de los extremos. Generalmente se cae en unos días, pero necesita unos cuidados básicos para evitar cualquier tipo de infección.

El muñón como se le suele llamar tendrá un color amarillento y conforme avanzan los días irá cambiando a color negruzco como síntoma que se va secando.

Lo normal es que se caiga entre el 6º y 15º día después de su nacimiento, dependiendo si el parto ha sido natural o por cesárea. Si perdura por más tiempo hay que consultar al pediatra porque puede que la herida esté fresca y tarde más en cicatrizar.

Los cuidados básicos del cordón umbilical es mantenerlo limpio y seco. Es bueno tenerlo expuesto al aire y limpiarlo diariamente. Algunos pediatras recomiendan utilizar algodón rociado con un poco de alcohol mientras que otros simplemente limpiar la herida y dejarla al aire para que cicatrice mejor.

Evitar baños muy calientes mientras no se haya caído el muñón. Darle los baños con una esponja.

Evitar tirar de él, aunque parezca que solo está unido por un pequeño hilito…, una vez que se ha desprendido quedará unas pequeñas pielecitas que desaparecerán por sí solas.

Durante su cura se pueden utilizar algunos antisépticos recomendados por los pediatras como la Clorhexidina. Es un antiséptico que no causa ni dolor ni mancha por lo que es fácil valorar y tener un seguimiento de la herida.

No se deben utilizar polvos de talco ni mercromina. Pero como indicábamos antes muchos de los pediatras más reconocidos aconsejan solo mantener la herida limpia y seca para su pronta cicatrización sin necesidad de utilizar ningún antiséptico.

Resumen cuidados básicos

• Mantener seca y limpia la herida para evitar una infección. Utilizar un pañal no muy alto que no tapone el ombligo.
• No sumergir el bebé en la bañera hasta que esté completamente seca la herida.
• No manipular el cordón para que se caiga antes.
• No utilizar polvos de talco ni mercromina.
• No usar ombligueros ni taponar la herida.

Cómo saber que no está cicatrizando bien…

• Fiebre
• Piel enrojecida e inflamada alrededor del ombligo
• Sangrado

Hay que acudir al pediatra.

Una vez que el cordón se ha caído hay que seguir las curas durante unos días más. Pero sobre todo alejar el ombligo del contacto con la orina ya que puede provocar una infección.

via: bebesymas/enfermerapediatricasevilla