Alcohol y embarazo
Alcohol y embarazo está totalmente en contradicción. Ningún tipo de bebida alcohólica está permitida para consumo en ningún momento del embarazo.
No solo se recomienda no ingerir alcohol cuando estás embarazada sino cuando planeas estarlo. En muchas ocasiones son embarazos no planeados y al no saber nuestro estado consumimos alcohol poniendo en riesgo la salud de nuestro bebé.
El alcohol produce un efecto negativo en el feto debido a que la ingesta de éste pasa rápidamente a la sangre llegando a la placenta, comunicación directa con nuestro hijo. Los niveles de alcohol que puede procesar nuestro bebé no son iguales a los que procesamos nosotros.
Las consecuencias pueden llegar a ser fatales en muchos casos. No solo se pone en riesgo aumentando los abortos espontáneos, sino que el bebé incluso puede nacer muerto.
Otras de las consecuencias de la toma de alcohol durante el embarazo es el bajo peso del pequeño, cabeza pequeña, estatura más baja de lo normal, discapacidad en el aprendizaje, retrasos en el habla, problemas de sueño, mala memoria, problemas cardíacos, problemas de sueño…
Durante los tres primeros meses se corre mucho riesgo, pero el cerebro del bebé se forma durante los 9 meses y en cualquier momento puede sufrir daños.
El síndrome alcohólico fetal es un término médico con el que se conoce el conjunto de alteraciones que puede sufrir un bebé cuyas madres consumieron alcohol durante el embarazo.
Cuando bebemos una copa de vino esa copa es la que estamos dando a nuestro bebé. Pasa por el torrente sanguíneo y a través de la placenta llega al pequeño. La concentración de alcohol es la misma para madre e hijo.
No podemos decir que exista alguna cantidad mínima que pueda ser ingerida; cuando decimos consumo de alcohol y embarazo, el consumo está totalmente prohibido. Obviamente habrá más daño cuanto mayor sea el consumo, pero no se puede garantizar que pequeñas dosis causen algún daño en el feto.
Otra de las preguntas que toda madre se hace es que una vez nacido, ¿se puede consumir?
Si le estamos dando el pecho a nuestro bebé, durante la lactancia igualmente es dañino consumir alcohol ya que igualmente representa un perjuicio para su alimentación ya que pasa a través de la leche materna.
Una vez que el bebé empieza a alimentarse con biberones y deja la leche materna, es entonces cuando no corre peligro.
Hay una campaña publicitaria impactante para concienciarnos del perjuicio que causa la ingesta de alcohol por embarazadas. Dicha campaña se titula Too Young to Drink y se aprecia como un bebé permanece dentro de una botella. Es una manera de concienciarnos y prevenir el síndrome alcohólico fetal.
Os dejamos el enlace, un video impactante.
TOO YOUNG TO DRINK – Video spot from Fabrica on Vimeo.
Un saludo del equipo de chupetemania