Qué tenemos que llevar cuando salimos de casa con un bebé?

Cuando una tiene un bebé, uno de los músculos que más tiene que ejercitar es el del sentido del humor. Yo recuerdo que no hacía más que encontrar paralelismos de mi vida en ese momento con el mundo animal: me sentía mamá leona cuando alguien quería coger a mi hija sin permiso, un poco vaca en aquellas interminables horas dándole el pecho (mi hija mayor era especialmente lenta mamando) y a veces un caracol porque cuando salía de mi casa lo hacía con toda la casa a cuestas.

¿Qué tenemos que llevar cuando salimos de casa con un bebé? Esta es una pregunta que nos hacemos a menudo y lo cierto es que la respuesta va a sonar realmente gallega. Depende. Depende de su edad, depende de si lo llevamos en carrito o lo porteamos, si le damos el pecho o toma biberón. Como decía Jarabe de palo, según como se mire todo depende. Mi recomendación es ¡no nos volvamos locos! se trata de coger las cosas que es más probable que necesitemos pero si se nos olvida algo tampoco será el fin del mundo, que no estamos en medio del desierto del Sahara y hay tiendas para emergencias. Creo que nuestro carácter influye y por supuesto si es el primer hijo o tenemos más. Con la mayor salía que parecía que me estaba mudando y con la pequeña en cambio prácticamente no cogía nada ¡hala, ahí, a lo loco!

Estas son mis recomendaciones sobre las cosas que tenemos que llevar cuando salimos de casa con un bebé.

1. Un bolso

Y digo bien, UN bolso. No llevéis uno para vosotros y otro para el bebé porque es un auténtico rollo. Si llevamos carrito hay diez mil tipos de bolsos maternales chulísimos y apañados. En cambio si vais a portear, por experiencia, os resultará mucho más sencillo llevar una mochila. Que es maternal, genial porque tendrá bolsillos a cascoporro pero si es un bolso grande normal y corriente pues también sobreviviréis, creedme.

Algunos bolsos llevan el cambiador incorporado, si no siempre viene bien llevar empapadores de usar y tirar que nos servirán para emergencias para muchas cosas.

2. Textil

Suele ser interesante llevar una muda aunque por mi experiencia os diré que Murphy, el de la ley, está siempre acechando detrás de la esquina. El día en que mi hija decidió hacer una caca explosiva de esas que lo ponen todo perdido resulta que estaba en un bar sin cambiador y encima me había dejado la muda en casa. Tampoco hace falta que sea el último modelo: dejad siempre un body y unos pantalones por ejemplo pero tened la precaución de revisarlo. A veces me pasó que hacía tanto que no lo miraba que la ropa que llevaba era mínimo dos tallas menor.

Por supuesto es interesante también llevar algún arrullo o similares por si hacer fresquito poder tener algo para echarles por encima. Las muselinas vienen muy bien también porque tienen un montón de usos. Al final se trata de llevar cosas versátiles que nos saquen de apuros

4. Pañales

Es importante llevar siempre pañales y toallitas, de hecho para mí es lo más fundamental. Los niños suelen hacer sus necesidades cuando lo necesitan (oh, wait!) y suelen ser, por mi experiencia, tremendamente oportunos. Llevad siempre dos o tres pañales, por si acaso.

5. Alimentación

En el capítulo de la alimentación de bebés estaremos de acuerdo todos en que cuando toman pecho y solo pecho es todo más fácil porque no hay que llevar nada. Sólo os recomendaría llevar un botellín de agua porque da mucha sed y llevar un poco de agua siempre viene bien en general. Si lo niños toman biberón la cosa se complica un poco más. Yo llevaba un termo con agua (sencillo, y no necesariamente de niños), un dosificador con la leche y el biberón. Si son más mayores un biberón para el agua suele estar bien y por supuesto poned un babero que también es muy útil.

Y por supuesto, chupetes “porsiaca”, que nunca están de más.

6. Algún juguetito

Suelen venir bien aunque, aceptadlo, los juguetes nunca estarán a la altura que unas llaves o un móvil de verdad. ¡Que son pequeños, no tontos!

¿Mi consejo? No nos volvamos locos y cuando pensemos en lo que tenemos que llevar cuando salimos de casa con un bebé no lo hagamos agobiados. Al final con lo que tengamos pasaremos y si se nos olvida algo ¡de verdad que no suele pasar nada!